Era una tarde especial, se había encendido otra vez esa luz que hace 2 años permanecía oculta, quería hacer cine, NECESITABA hacer cine.
Miraba los coches cruzarse, la gente que los conducía, sus acompañantes, el conductor del autobús, los yonkis del parque, las parejas discutiendo, todo me resultaba interesante, quería coger una cámara y ponerme a grabar en ese mismo instante.... Todo volvía a encajar en mi, en mis perspectivas de futuro...
La entrevista fue perfecta, hablamos de proyectos, de motivación, de iniciativa, algo más que necesario y más en tiempos de crisis...
Al llegar a casa me puse a escribir un guión que llevaba bastante tiempo a medias y acabé volviendo a perderme en un sinfín de saltos de tiempo, actos sin sentido y situaciones imposibles...
...¿Por qué tendré esa manía de intentar siempre lo imposible?
